7 de octubre. Nota de Prensa de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril Público y Social de Cuenca. Así de convincente se ha mostrado Estefanía Torres, arquitecta que conoce bien el proceso que se siguió en Valladolid (su ciudad natal) para integrar la estación y las vías del ferrocarril en el centro de la ciudad. "Vive el tren en Cuenca" (promovido por la Plataforma en Defensa del Ferrocarril Público y Social de Cuenca) se presentará el próximo sábado 10 de noviembre a las 6 de la tarde en Residencia Universitaria Alonso de Ojeda, junto al parque de los Moralejos.
Para Torres "Existen múltiples soluciones para permeabilizar las vías del tren, de manera que se conviertan más en un espacio de comunicación e intercambio que en una barrera. Los expertos en urbanismo y movilidad defienden las bondades de mantener las estaciones de tren en el centro, reduciendo la necesidad de movilidad y evitando trayectos innecesarios, que además, se suelen hacer en vehículo privado, con lo que supone de derroche de energía y de emisiones de gases de efecto invernadero. Además, Cuenca como ciudad de servicios para los pueblos de la provincia, dejaría de tener sentido si se lleva la estación fuera de la ciudad. En definitiva, sería la puntilla para el tren regional y el empobrecimiento de la capital".
La alternativa que se presentará este sábado es sostenible, realista y con la estación del tren como principal centro de atracción y comunicación de la ciudad, garantizando el futuro de la línea.
De esta manera, la estación de ADIF en el centro, junto con la estación de autobuses, será un auténtico nodo intermodal de movilidad sostenible. De este centro partirán itinerarios peatonales, ciclistas (con un gran aparcamiento y un sistema de préstamo público) de autobús urbano y de taxis.
El plan reserva amplios espacios peatonales, priorizando los equipamientos sociales, deportivos, culturales y ambientales. También tendrá espacios comerciales (pequeño comercio), empresariales (energías renovables y agroindustria) y zonas verdes (xerojardines). Las zonas residenciales estarán integradas en el resto de los elementos, garantizando que el espacio tenga presencia durante todo el día y que no sea un desierto fuera del horario comercial. Todo el espacio a urbanizar tendrá continuas referencias al ambiente ferroviario, en el mobiliario urbano, las tipologías constructivas, e incluso en los nombres de las calles.
El tráfico rodado será escaso (no hay ningún vial de paso), pacificado e integrado, con modos de transporte motorizado y no motorizado: cicloespacios y ciclocalles. El automóvil ocupará un espacio reducido de todo el espacio público.
Se ha tenido en cuenta la situación de profunda crisis económica. Por ello, destaca una importante superficie dedicada a huertos urbanos ecológicos que ya son un éxito en ciudades como Vitoria (declarada Ciudad Verde Europea) pensados como complemento a la economía familiar para sectores de bajos ingresos.
Más información:
0 comentarios:
Publicar un comentario